El sector de tecnología en México está en constante crecimiento, impulsado por el avance de la digitalización de las empresas, alineado con el escenario económico del país que ofrece muchas oportunidades de desarrollo para las compañías. Incluso, en un reciente informe difundido al final de 2023 por el Banco de México (Banxico), la economía debe crecer hasta 3.7% en 2024. La revisión para este crecimiento se explica, en mayor medida, por la postura fiscal ahora prevista que responde a la actualización de las perspectivas de crecimiento para EE.UU., sugiriendo una desaceleración menos pronunciada de la demanda externa que enfrenta México, lo que es positivo porque sugiere que la economía interna del país crecerá a un ritmo más rápido de lo esperado anteriormente, dando a las empresas mexicanas una oportunidad de expansión y crecimiento.
Y la inflación en México seguirá disminuyendo, alcanzando el 4,1% interanual de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Esta disminución, junto con el mercado laboral sólido, con un desempleo bajo y medidas más amplias, confirman la fortaleza de la economía mexicana.
Las noticias para el mercado tecnológico también son positivas para 2024. La consultora de inteligencia digital, Needed, publicó en su informe un crecimiento de 13% de madurez digital de las compañías mexicanas, con respecto a 2022, posicionándose con un porcentaje de 34% en la escala del estudio. Para llegar a este resultado, fueron estudiados más de 10,000 participantes de empresas líderes en su rubro.
Otros datos relevantes del estudio fueron que la brecha entre las empresas que se encuentran en los diferentes niveles de transformación digital se ha ampliado en 2023, porque pocas han logrado mantener un ritmo de avance tecnológico sostenido. Como resultado, las empresas más atrasadas en su transformación digital corren el riesgo de perder competitividad.
Incluso que la incorporación de personas jóvenes en las empresas está acelerando la adopción de un pensamiento más digital. Sin embargo, este cambio de mentalidad no es homogéneo entre áreas, generalmente son los departamentos de ventas y marketing, que están más avanzados en este sentido.
Con todos estos datos divulgados, es posible determinar las cuatro tendencias más importantes que se observarán este año:
- Inteligencia artificial (IA): La IA se está convirtiendo en una herramienta cada vez más relevante para las empresas, ya que les permite automatizar tareas, mejorar la toma de decisiones, generar nuevos insights sobre análisis predictivo, gestión de inventarios, marketing, producción y comportamiento del consumidor.
- Big data: El big data es un conjunto de datos masivos y complejos que pueden ser utilizados para identificar tendencias, patrones y oportunidades. IDC señala que esta solución será utilizada por el 60% de las empresas mexicanas, principalmente entre el comercio minorista, la manufactura y los servicios financieros, para mejorar la toma de decisiones, marketing y operaciones.
- Computación en la nube: La nube permite a las empresas acceder a recursos informáticos, de almacenamiento, aplicaciones de manera remota, flexibilidad, escalabilidad y reducción de costos, que la hacen muy atractiva para los negocios.
- Ciberseguridad: La ciberseguridad es una prioridad cada vez más importante para las empresas, ya que los ataques cibernéticos son cada vez más frecuentes y sofisticados, lo que se hace necesario para proteger los datos, principalmente del cliente, e infraestructura. Sin embargo, son pocas las organizaciones que están priorizando este campo, generalmente las que lo hacen, son aquellas que manejan información sensible, de escala global o han experimentado ataques en el pasado.
Estas tendencias están impulsando la transformación digital de las empresas mexicanas y revolucionando la forma que operan al representar una oportunidad de que sean más eficientes, competitivas y adaptables a los cambios del mercado. Para esto, las organizaciones deben invertir en la capacitación de los empleados, la adopción de nuevas tecnologías y la creación de una cultura de innovación. Además, es importante que las compañías colaboren con proveedores tecnológicos fiables para obtener el apoyo que necesitan para implementar estas herramientas.
Todos estos datos subrayan la necesidad de un esfuerzo continuo: impulsar la adopción de mejores habilidades digitales, mejores prácticas y conocimientos, donde emerge como una prioridad ineludible para no solo subsistir, sino para sobresalir en el competitivo panorama actual.